Bienestar

CUANDO ECHAR A CORRER ES LA SOLUCIÓN

El running, lo que comúnmente conocemos como “correr” en español, es algo más que una moda pasajera asociada al mundo del deporte y el nuevo lifestyle. Para demostrarlo descubriremos cuáles son algunos de los beneficios más notables y más desconocidos de esta actividad física que continúa sumando adeptos alrededor del mundo.   – Nos mantiene jóvenes: reduce el declive físico y psicológico hasta en un 50%. – Salva vidas: disminuye el riesgo de padecer infartos y anginas de pecho. – Ayuda a que los músculos y huesos estén más fuertes, evitando su debilitamiento y deterioro progresivo. – Aumenta el colesterol bueno, reduce el riesgo de coágulos, mejora la eficiencia de los pulmones y mantiene la elasticidad de las arterias, protegiendo al cuerpo del colesterol malo y la arteriosclerosis. – Previene el alzhéimer: según estudios de la Universidad de Cambridge correr ayuda a generar neuronas en el hipocampo, que mejoran la actividad mental, creando mayor número de conexiones entre las neuronas cerebrales. – Mejora la autoestima y la autoconfianza. – Elimina el estrés, liberando tensión. – Mejora la flexibilidad y la coordinación – Nos hace más felices: contribuye a generar endorfinas, la hormona de la felicidad. – Mejora y ayuda a crecer los cartílagos – Nos hace más resistentes ante el dolor, aumentando el umbral de dolor. – Alivia los dolores de cabeza: la universidad sueca de Gotemburgo concluye tras una investigación que aquellas personas que sufren migrañas reducen esos episodios saliendo a correr cuarenta minutos, a lo largo de tres días por semana, durante tres meses. – Regenera el músculo, en contra de lo que se pensaba la Universidad de Illinois ha demostrado que el running acelera el proceso por el cual las células del cuerpo generan nuevo músculo. – Fortalece los huesos: los ejercicios de carga e intensidad media-alta contribuyen a aumentar la densidad ósea, protegiendo al organismo contra fracturas y la temida osteoporosis.